Editorial de la Palabra de Dios

12 de Abril de 1998
Centro Mariano “ARCA DE LA NUEVA ALIANZA” (M.P.D.)

“Y apareció en el cielo un gran signo:
una Mujer vestida de sol, con la luna bajo sus pies y una corona de doce
estrellas en su cabeza.”
(Ap. 12,1).

“Deseo que propaguen mis mensajes por todo el mundo.”
(Cuenca, mens.67)

1

ANUNCIO: La primacía de la oración

En el mensaje de Abril la Virgen nos invitaba a acoger el fruto de la Pascua: la unión de nuestra vida a Dios Creador. El mensaje del mes siguiente, nos reitera la búsqueda de la santidad y la renovación de la oración.

Queridos hijos, hoy los invito a glorificar a Dios. Que el nombre de Dios sea santo en sus corazones y en su vida. Hijitos, cuando están en la santidad de Dios, Dios está con ustedes y les dona la paz y la alegría, que vienen solo de Él a través de la oración.

Por tanto, hijitos, renueven la oración en sus familias y su corazón glorificará el santo Nombre de Dios, y el paraíso reinará en su corazón. Yo estoy junto a ustedes e intercedo ante Dios por ustedes. Gracias por haber respondido a mi llamada.

 (Mediugorie, 25-5-97)

María cambia nuestra pastoral de programas y actividades febriles, fruto de la falta de experiencia interior y que nos pone en la vana competencia con el mundo, y establece la primacía de la oración del corazón, de la oración en familia, de la oración de grupo, en la cual el Espíritu Santo crea la comunión, verdadero signo del Reino de Dios. La oración de fe pone después en acción al Omnipotente, más que todas las iniciativas planeadas en el escritorio.

Los mensajes de María son una revolución pastoral en la época en la cual el hombre, que ha descubierto todo, piensa que tiene que hacer todo y no deja actuar a Dios. Si el Señor no construye la casa, en vano se afanan los constructores… y la herencia del Señor son los hijos, recompensa es el fruto de las entrañas (Sal. 126). Es Él que da fecundidad a la Iglesia y llama a aquellos que quiere en su viña. A nosotros nos pide solo rezar para que mande obreros para la vendimia…Y nada más. Porque no se trata de querer o de correr, sino de que Dios tenga misericordia (Rom. 9, 16).

 (Eco de Mediugorie, 134, pág. 1 – condensación)

2

MARÍA EN LA IGLESIA

por el mismo camino que tuvo principio en la desobediencia de la serpiente, por ése también fuera destruída. Porque Eva, cuando aún era virgen e incorrupta, habiendo concebi-do la palabra que le dijo  la serpiente, dio a luz la desobediencia y la muerte; mas la Virgen María concibió con fe y alegría cuando el ángel Gabriel le dio la buena noticia de que el Espíritu  del  Señor vendría sobre ella y la fuerza del Altísimo la sombrearía, por lo cual lo nacido en ella, santo sería, Hijo de Dios; a lo que respondió ella: Hágase en mí según tu palabra (Lc. 1, 38). Y de la Virgen nació Jesús, al que hemos demostrado se refieren tantas Escrituras, por quien Dios destruye la serpiente y a los ángeles y a hombres que a ella se asemejan, y libra de la muerte a quienes se arrepienten de sus malas obras y creen en Él”.

(San Justino- siglo II).

3

MANIFESTACIONES MARIANAS: DAMASCO (SIRIA)

El 22 de noviembre de 1982, en la ciudad de Damasco, a corta distancia de la casa de Ananías (donde Pablo se convirtió) comenzó lo que se ha llamado “el milagro de Damasco”. Ese día, una joven llamada Mirna (de 18 años, católica del rito melquita bizantino casada hacía siete meses con Nicolás Nazzour griego ortodoxo), mientras oraba por su cuñada enferma junto con otras dos jóvenes (una ortodoxa y otra musulmana) comenzó a exudar aceite de sus manos. Al imponerle el aceite a la enferma quedó curada instantáneamente. Tres días después la madre de Mirna fue curada de la misma manera.

El 27 de noviembre de 1982, aniversario de la aparición de María bajo la advocación de Medalla Milagrosa a Sta. Catalina Labouré, una estampa de la Virgen María y del Niño Jesús comenzó a verter aceite. Mientras oraban, el aceite apareció en las manos de Mirna, y entrando en éxtasis, escuchó una voz suave de mujer que le decía : No tengas miedo, Yo estoy contigo. Abran las puertas y no le impidas a nadie que me vea… Desde ese momento las puertas de la casa de Nicolás y Mirna se abrieron para recibir a la gente que se acerca a orar ante la Imagen día y noche.

Al día siguiente un sacerdote católico (el Padre Zahlaoui, quien comenzó a acompañar a Mirna con autorización de su obispo), otros sacerdotes, oficiales de seguridad del gobierno y un médico traído por ellos examinaron a Mirna y la estampa. El patio estaba lleno de gente rezando. Retiraron la estampa del marco y descubrieron que el aceite estaba goteando de la propia estampa. Le pidieron a Mirna que se lavara las manos y que rezara en su presencia. Inmediatamente el aceite salió de sus manos. El médico las examinó y reconoció que se trataba de un milagro. Desde entonces las autoridades de Damasco han adoptado una actitud de respeto en relación con los eventos de Sofonía. Exámenes realizados al aceite por epider-mologistas y médicos de diversas nacio-nalidades han mostrado que se trata de aceite de oliva de alta calidad combinado con hiervas de las que se utilizan para el aceite sacramental. Está comprobado que el cuerpo humano no puede producir aceite.

En la noche del 18 de diciembre de 1982, un gran número de personas estaban rezando delante de la Imagen. Mirna sintió que algo la estaba conduciendo hacia la terraza de la casa. Cerca de 10 personas la siguieron incluyendo su esposo y su papá. Cruzando la calle, en la parte alta de un árbol, Mirna vio un globo grande, luminoso, blanco posado sobre la rama de un árbol. Mientras miraba, la esfera se abrió, partiéndose desde arriba, dividiéndose en dos medias lunas. Cuando las mitades se abrieron, un arco de luz apareció sobre la mitad superior dentro de la cual estaba la Virgen María. Tenía un velo blanco que cubría su cabello y una capa azul. El vestido blanco cubría sus pies y solamente se podían ver sus manos. El vestido y la capa parecían de color blanco y azul claro. En su mano colgaba un largo rosario. María se acercó hasta Mirna. La Virgen habló en árabe clásico y dijo:

Hijos míos:

Acuérdense de Dios, porque Dios está con nosotros. Ustedes conocen de todo, pero a la vez no saben nada. Sus conocimientos todavía son incompletos, mas llegará el día en que todos van a conocer todo, como Dios me conoce a Mí. Hagan el bien a los que les hacen mal y no traten mal a nadie.

Yo les di más aceite del que me pidieron y también les daré algo mucho más fuerte que el aceite.

Arrepiéntanse y tengan fe. Acuérdense de mí en sus alegrías. Proclamen y testifiquen a mi Hijo Enmanuel. Quien lo haga se salva y quien no lo haga tiene su fe en vano.

Ámense unos a otros.

No les pido dinero para dar a los templos, ni el dinero que es para repartir entre los pobres. Sólo les pido amor. Los que reparten su dinero a los templos o entre los pobres, pero sin tener amor, esos no son nada.

Visitaré los hogares con más frecuencia, porque los que van al templo no siempre van a orar.

Yo no estoy pidiendo que me erijan templos, sino simplemente un oratorio para peregrinación.

Dense siempre: no nieguen nunca su ayuda al necesitado.

El 30 de diciembre de 1982, el patriarca griego ortodoxo Ignacio IV Hazim recibió a Nicolás y a Mirna y dio un reconocimiento parcial de lo que estaba sucediendo. El mensaje se leyó en todas las Iglesias Griego Ortodoxas de Damasco. El patriarca ordenó que la imagen fuera llevada en procesión a la Iglesia de la Santa Cruz que queda muy cerca de la casa de Nicolás. Pero la imagen dejó de derramar aceite, mientras que comenzó a hacerlo una imagen similar en la casa de Mirna. El 21 de febrero, la imagen regresó a la casa de Nicolás. A partir de entonces, comienza a acompañar a Mirna y a anotar los mensajes de las apariciones, el Padre Joseph Malouli, sacerdote católico Lazarista del Rito Romano.

El 25 de noviembre e 1983, Mirna cayó en otro éxtasis y comenzó a mostrar signos de los estigmas. Su casa estaba llena de sacerdotes de cada una de las diferentes Iglesias presentes en Damasco: Sirio católicos, Romano católicos, Rumanos católicos, griegoortodoxos, sirio ortodoxos…La sangre fluyó de sus manos, pies y costado. Luego cesó. Esto mismo ocurrió el Jueves Santo de 1984 (19 de abril). Las heridas duraron 6 horas y luego se cerraron sin cuidado alguno. Los dolores duraron unos días más y luego desaparecieron.

El viernes 7 de septiembre Mirna tuvo otro éxtasis. La Virgen María le confió un secreto.

Durante el año, el aceite salió en presencia de personas de todo tipo de vida y de casi todas las religiones . El 4 de noviembre fluyó delante del Pro Nuncio Nicolás Rotunno.

El 3 de marzo de 1985 Nicolás, Mirna, el Pbro. Zahlaoui y el Pbro.  Malouli fueron a ver al obispo católico en Hauram.

Durante este año Mirna vivió el silencio de Dios y de todos los milagros. En este tiempo, Mirna estuvo embarazada y el 15 de octubre de 1986, después de cuatro años y medio de matrimonio, Mirna dio a luz una niña. Posteriormente, mientras estaba de viaje en California tuvieron un niño.

El Jueves  Santo de 1987 (16 de abril), año en que la Pascua se celebró el mismo día en la Iglesia Oriental y en la Iglesia Occidental, Mirna recibió nuevamente los estigmas como una señal de que Dios deseaba la Unidad entre las Iglesias.

Los mensajes se siguen sucediendo desde entonces. La imagen continúa exudando aceite y numerosas personas se reúnen a rezar en la casa de Mirna y Nicolás. Las apariciones se realizan en la víspera de las festividades. Mirna recibe los estigmas cada vez que se celebra la Pascua en unidad (Iglesia católica y ortodoxa).

       El Sábado Santo de 1990 (14 de mayo), después de los estigmas, Cristo le dijo a Mirna:

Hijos míos,

ustedes enseñarán a las generaciones unidad, amor y fe. Yo estoy con ustedes.Pero, hija mía, tú no escucharás mi voz de nuevo, hasta que la Fiesta haya sido unificada.

4

MARÍA EN EL MUNDO

Respecto del mundo y de su historia, María pone de relieve lo que se ve desde el cielo.  Por eso nos alerta: “Satanás está trabajando duramente en el mundo” (14-1-85).  Los frutos que recogemos en una civilización de la muerte, pueden decirnos si es exagerada la afirmación mariana.

María nos advierte la seriedad con que se ve la situación del mundo de hoy, en el cielo: “Ustedes no se pueden imaginar lo que va a suceder ni lo que el Padre eterno enviará a la tierra. ¡Por eso es que deben convertirse!.  Renuncien a todo.  Hagan penitencia.  Expresen mi gratitud a todos mis hijos que han orado y ayunado.  Yo llevo todo esto a mi divino Hijo para poder obtener un alivio en su justicia contra los pecados del mundo” (24-6-83).

En su plan de Madre por salvar a sus hijos, María remarca el papel primordial de la oración: “Cuando digo «oren, oren, oren», no solo quiero decir que aumenten el número de horas de oración, sino que también refuercen el deseo por la oración y que estén en contacto con Dios.  Sitúense permanentemente en un estado espiritual de oración” (26-6-84). “Queridos hijos: si ustedes viven los mensajes, están plantando en ustedes las semillas de la santidad” (Octubre ‘85).

5

NOTICIAS MARIANAS

Nicolás es un hombre valioso. Diplomado en alta peluquería para señoras en Alemania, realizó a su regreso, con tanta habilidad como suerte, una operación comercial que le permitía vivir con desahogo. Y había aprovechado su oportunidad para poner un restaurante de lujo en Lattakié, en el litoral. Pero lo ocurrido a su mujer lo ha determinado a dejar el negocio. Ha cambiado de planes y ha vendido  su restaurante, perdiendo dinero en la transacción.

Mirna es morena, sonriente y serena; cría con esmerada ternura a su  primer retoño, una niña vivaracha: Myriam, nacida el 11 de octubre de 1986. Tiene su segundo hijo. ¿Quién podría imaginarse que tiene apariciones y que ha recibido tres veces los estigmas, como Francisco de Asís?

Esta casa familiar se ha convertido en una especie de santuario. El patio, a cielo raso, ha sido cubierto. Se ha convertido en la pieza interior y central de la casa. Los peregrinos desfilan por allí y rezan devotamente delante de la minúscula imagen. El padre Malouli se ocupa de recoger el aceite para los enfermos, que se sienten consolados al recibir su unción. La pequeña Myriam visita también a Nuestra señora con sólo deslizarse un poco en su cochecillo infantil. Bajo el icono, una inscripción en rojo, muy visible: Discúlpenos, pero no aceptamos dinero ni regalos. Mirna y Nicolás han escrito el aviso de buena fe, por entender que este desinterés es indispensable para su credibilidad.

* Vicka  en Verona: El 1º de Junio se reunió un gran gentío en el Instituto S. Zeno para encontrar a Vicka y a Sor Elvira con unos jóvenes de la comunidad Cenáculo. Sus testimonios tocaron los corazones; las palabras de Sor Elvira acerca de la terapia de la gracia para los tóxicos – dependientes trastornaron saludablemente al auditorio.

Vicka recibió, como siempre, la aparición de la Virgen a las 6:40 P.M.; duró 10 minutos. Después se levantó radiante y dijo: “La Virgen estaba contenta, nos bendijo a todos imponiendo las manos. Dijo que no quiere dar otros mensajes porque los hombres continúan sin hacer lo que Ella quiere. Debemos tomar en serio lo que Ella dice”.

* Vicka y el periodista: Es una escena que me impresionó. Vicka encontró por casualidad un periodista de Split. Cuando supo quién era, él le dijo que no creía en Dios ni en nada: «Mi abuela creía en la vida eterna, para mí es un cuento de hadas». Y esperaba un regaño. Por el contrario Vicka le dijo sonriendo: «Tú eres libre de seguir tu camino, pero yo no puedo decir otra cosa que la verdad: Dios existe, hay una vida eterna, la reencarnación no existe. Pero tu estás libre de no creerlo. Tu abuela tenía razón en creer en la vida eterna, pero si tu decides diversamente, es decisión tuya. ¡Bueno, yo te he dicho la verdad!». El periodista quedó tan impresionado por la alegría y por la libertad de la vidente que terminó por decir: «Oh, ¡vendré pronto a Mediugorie!». Esto me recuerda cuando Bernardette de Lourdes les decía a sus directores: «Yo no estoy encargada de hacerles creer, sino de decirles la verdad.»

* El fruto de la oración: Un recaudador de impuestos francés fue bautizado por P. Jozo el 23 de abril pasado. La unidad de la pareja Hervé se había prácticamente terminado desde 1990, cuando el esposo, incrédulo, había decidido el divorcio: había esperado que la hija fuera mayor de edad en 1997. En la Pascua de 1994 la esposa, Denise, toda fe y oraciones, hace un viaje a Mediugorie con algunos amigos.

En ese lugar vive un gran momento de gracia cuando Vicka reza sobre ella: la invade una gran fuerza y, después de un desahogo de lágrimas, se va a la colina de las apariciones, gustando una paz y una alegría desconocidas hasta ahora. Al bajar decide con los amigos ofrecer el Rosario por el marido.

Ese mismo día en Francia Hervé es dominado por un gran odio hacia la esposa, hasta tener miedo. Alrededor de las 10:00 P.M. (la hora del Rosario) la presencia divina lo agarra y una extraordinaria iluminación le muestra la verdad de su vida, de su pecado y del amor insondable de su Creador. En un momento comprende que Dios existe, que María es su Madre y se derrumban todas sus resistencias: prueba la alegría de un niño: “A los 50 años – dirá – nací en 5 segundos”. Pascua florida de 1995: él mismo viene a Medj. con Denise y, escuchando al P. Jozo en Siroki Brijeg decide: recibiré el bautismo. Un sacerdote le responde que tiene que comenzar una catequesis. Dos años después regresa con la familia y el P. Jozo lo bautiza ante un gentío de franceses en lágrimas …de alegría. “He aquí – concluye el P. Jozo – el fruto de un corazón de esposa que ha rezado con perseverancia por 32 años, y ha obtenido la gracia de que el marido dejara el pecado”.

6

TESTIMONIO

       Diálogo con Mirna:

“- ¿ Está más unido ahora  que antes su hogar?

–  Más o menos igual, pero ahora es todo mucho más profundo.

– ¿ Has recibido mensajes sobre el porvenir del mundo?    

– La santísima Virgen me ha pedido que guarde estas cosas en secreto hasta la hora de mi muerte. Entonces las podré revelar.

Entre los mensajes conocidos, el Señor le dijo  el 26 de noviembre de 1985:

– ¡ Ay de la tierra, donde la corrupción se ha generalizado!

Y el 6 de noviembre de 1986:

-Que las cosas de la tierra no te turben, porque por mis heridas alcanzarás la eternidad.

Seguí preguntándole:

– Al principio veías a la Virgen. Ahora, a Cristo. ¿ Cómo lo ves?

– En medio de un resplandor en el que Él es una luz más fuerte. No distingo los rasgos.

– ¿Son dolorosos los estigmas?

– Si…

– ¿Más que los dolores del parto?

– Los dolores del parto duran más, pero el dolor de los estigmas es más intenso.

– Mientras duran los estigmas, ¿ves la Pasión de Cristo?.

– No; la vivo, pero no la veo.

Mirna, intuitiva, vive profundamente su experiencia. Le cuesta trabajo responder. Duda, sonríe, a veces no encuentra la palabra apropiada y prefiere no decir nada a hablar de más. Y eso contrasta con la claridad lapidaria de los mensajes de la aparición, que ella dicta sin titubeos, enseguida, porque después se le olvidan. Estos mensajes la rebasan, porque ella es incapaz por sí misma de pensar tales máximas.

También he interrogado a su marido:

– ¿Han cambiado tu vida estos acontecimientos?

– Absolutamente.

– Pero ¿qué es lo que ha cambiado?

– En principio, el retorno a la fe. Se había eclipsado durante mis estudios de alta peluquería en Alemania. Inmediatamente después, la mentalidad. Antes, yo no creía en el pecado. Ahora, lo percibo muy bien. Antes luchaba y no tenía inconveniente en devolver mal por mal. Los mensajes me han enseñado ahora a perdonar de corazón y a estar por encima de la ley del talión.

– ¿ Y tu matrimonio? ¿Ha cambiado? – le pregunté.

– Se ha vuelto santo, sagrado. Cuando conocí a Mirna, le dije: “¿Para qué  casarse por la Iglesia? ¿Qué ganaríamos con ello?”. Ella, sin embargo, lo quería; nuestras familias también. Me sometí por convencionalismo, no por convicción. Cuando el aceite le comenzó a manar, aconsejé a Mirna: “No hables de ello; nos complicaría demasiado la vida”. Mirna me obedeció, pero estaba perpleja. Entonces la Virgen le dijo en la siguiente aparición: “ No tengan miedo, abran sus puertas. No priven a ninguno de los que esperan socorro”.

Y llegó  lo que Nicolás había previsto: su hogar familiar, antes tan cuidado, está hoy invadido por incesantes visitas. Ya no tienen casa. Es molesto para su libertad, para su trabajo, para su reposo.

En aquel momento los “Hermanos musulmanes” se mostraban muy agresivos. Había riesgo de represalias por su parte, y se esperaba cierta incomprensión de las diversas Iglesias, por tratarse de un matrimonio mixto. Sin embargo, ellos asumieron con tranquila abnegación esta aventura difícil, tan impropia de una vida normal. La madre de Nicolás pasa todo su tiempo cuidándo el patio, que tiene siempre impecablemente limpio, para que sea digno de albergar a Nuestra Señora.

Nunca se terminan las obras en la casa para poder dar respuesta a nuevas necesidades: consolidar y hacer más alto el pretil de la terraza, que amenaza con desprenderse por la presión de la muchedumbre. Pregunté a Nicolás:

– ¿Eres más feliz o menos feliz que antes?

– He salido perdiendo económicamente, pero soy mucho más feliz en mi corazón. He perdido la tierra, pero he ganado el cielo.

  Fruto del Rosario (Mediugorie)

Fruto del Rosario fue también la curación repentina de una niña de ocho meses en el vientre de su madre. Hija de los amigos Sherry y Ron, la habían esperado por muchos años. Mientras que la primera ecografía daba todo OK, la segunda reveló una enfermedad irreversible en el corazón de la niña que, con una operación, tenía solo una probabilidad sobre cien de salvarse. Los padres estaban desconsolados.

Sherry se acordó entonces del Rosario de madera que una amiga le había traído de Mediugorie; lo tuvo sobre su vientre rezando, y lo apretaba contra el mismo para hacerlo sentir a la pequeña hija. Y he aquí que poco después la niña comenzó a moverse.

Al día siguiente, después del rezo del Rosario de los padres, la niña se hizo sentir con una especie de brincos en el vientre de la madre. Nueva ecografía mientras los padres rezaban manteniendo la respiración. El ginecólogo llamó a todo el personal médico y les mostró la pantalla: toda el agua que tenía que sofocar al feto había desaparecido inexplicablemente. La pareja fue invitada a regresar a la casa, no había necesidad de una operación. Annamaría nació en septiembre de 1994 y ahora reboza de salud y de alegría. Los padres se han vuelto apóstoles de María y del Rosario. No he contado esto para decir que el Rosario tiene poderes mágicos e infalibles. No. A veces Dios permite las pruebas, pero gracias a la oración Él dona fuerza y paz. Entonces la Cruz se vuelve fuente de alegría, dijo María. Pero muchas curaciones nos son concedidas porque no se reza y no se ayuna bastante por el enfermo. En la medalla milagrosa, la Virgen nos ha explicado que los rayos blancos son todas las gracias que quisiera darnos, ¡pero que nosotros no pedimos!

7

MENSAJE

El 31 de mayo de 1984, fiesta de la Ascensión, Mirna comenzó a exudar aceite por su frente, rostro, cuellos, manos y ojos. Entró en éxtasis y se le apareció Jesús quien le dio un mensaje:

Hija mía, Yo soy el Principio y el Fin. Yo soy la Verdad, la Libertad y la Paz. Mi paz les doy. El que no busca la aprobación de las gentes, ni teme su desaprobación recibe la paz verdadera que se realiza en Mí. Vive tu vida dulce e independientemente. Que las fatigas que soportes por Mí no te quebranten. Antes bien, alégrate. Yo sabré recompensarte. Tus fatigas no se prolongarán, ni tus dolores durarán demasiado. Reza, adora, porque la vida eterna merece estos sufrimientos. Reza para que se cumpla en todo la voluntad de Dios y di:

Muy Amado Jesús,

concédeme descansar en Tí

por encima de todas las cosas,

por encima de toda criatura,

por encima de todos tus ángeles,

por encima de toda alabanza,

por encima de toda alegría y exultación,

por encima de toda gloria y dignidad,

por encima de toda corte celestial.

Porque sólo Tú eres el Altísimo

 sólo Tu eres poderoso y bueno

 sobre todas las cosas.

Ven a mí y consuélame.

Rompe mis cadenas,

y concédeme la libertad.

Porque sin tí mi alegría es incompleta,

sin tí está vacía mi mesa.

Entonces vendré Yo para decir:Aquí estoy; vengo, porque me has invitado.

8

LA REVELACIÓN PRIVADA

Cuando se habla de “profecías”, generalmente se asocia esta palabra con la posibilidad de conocer el futuro. Profecía pasa a ser sinónimo de vaticinio entonces.

Pero cuando vemos qué nos dice San Pablo sobre el don pentecostal de la profecía, podemos sorprendernos. “El que profetiza habla a los hombres para edificarlos, exhortarlos y reconfortarlos  ( 1 Cor. 14, 3). Es decir, la profecía o mensaje carismático, fundamentalmente es una palabra del Espíritu para el camino y la vida de la comunidad.

En la experiencia pentecostal o carismática, el dar mensajes a la comunidad puede ser un hecho común, habitual. No es extraordinario o poco frecuente.

En este sentido, pastoral y comuni-tariamente conviene tener en cuenta dos cosas:

1. No hay que exagerar el discernimiento minucioso de los mensajes. Conviene tener un criterio práctico si es que su contenido no ofrece objeciones doctrinales o morales: que cada uno saque el provecho (edificación) que puede darle a su vida personal o comunitaria.

2. El que profetiza debe estar integrado a las pautas pastorales y en la oración comunitaria sin jugar un rol especial a causa de obrar como  mensajero carismático. Este don como cualquier otro, es tal, si  “sirve para la edificación de la comunidad” (1 Cor. 14, 12)

De los muchos mensajes recibidos en una comunidad de oración, ofrecemos uno para ejemplificar mejor cómo el Espíritu puede acompañar la vida comunitaria a través de la edificación, la exhortación y el comportamiento que menciona Pablo.

Bendigan al que abre camino delante de ustedes. Necesito corazones  nuevos, corazones entregados sensibles a mi llamado.

Yo les doy la gracia. Anímense. Caminen. Avancen. Yo voy delante. Golpeen las puertas y las puertas se abrirán. No hay puertas cerradas para mis creyentes.

Pueblo mío, mi Madre ya abrió las puertas, no teman pasar por ellas. Yo te doy los signos. Es el tiempo de mi Espíritu. Es el tiempo de la comunidad  por mi Espíritu y con mi Madre.

Este tiempo de misión, es el tiempo de las comunidades como semillas en el desierto. Gracia para las comunidades misioneras, gracia para la Obra de mi Padre a través de estas comunidades en marcha.

No temas sembrar comunidades, son los brazos de mi Cruz extendidos por el mundo. Brazos no impotentes en la entrega del Amor.

Extiendan mi Cruz en el desierto de los hombres porque extenderán mi Amor. El único que sacia. El único que salva. El único que da respuesta.

Que mi obra corra, si es necesario, para que como atleta ensanche su corazón y anuncie mi Palabra. Corran descalzos, no teman lastimarse, sepan por qué sangran sus pies. Corran con la mirada hacia adelante. Yo estoy con ustedes.

                                                                              18-3-97

                Es un mensaje sencillo que anima y ayuda a la comunidad y no tiene nada más de extraordinario que eso.

Padre Ricardo, MPD