El encuentro fraterno se hace posible en los lugares más hostiles a través de la Madre.
En el mes de mayo, en algunos países del continente se venera más particularmente a la Virgen María. Ella, en el contexto bélico que vive la humanidad es un signo de esperanza, sobre todo, en medio de los conflictos interreligiosos de Medio Oriente. En este sentido se pueden reconocer algunos aspectos en los que María abre puertas al diálogo, el entendimiento y la paz, entre culturas y religiones.
La Virgen en el Corán
Antonino Grasso, mariólogo y miembro de la Pontificia Academia Mariana Internacional, cuenta que María aparece en cinco episodios dentro del libro sagrado: el nacimiento, el relato cuando ella se retira muy joven al templo bajo la protección de Zacarías, la anunciación, el parto y una referencia sobre la defensa contra una calumnia. El Corán relata que el nombre de María significa “devota y madura” y, en otro capítulo, que ella se retira muy joven al templo bajo la protección de Zacarías y es nutrida prodigiosamente por Dios. En este pasaje está en compañía de los ángeles y del arcángel Gabriel. María es la única mujer llamada por su nombre en el Corán. Teólogos islámicos cuentan que la forma en la que se la presenta a María en el Corán la convierte en un modelo de fe para la mujer musulmana y un signo dado por Dios al universo. Es considerada un ejemplo a seguir por escuchar al Señor y decir que sí sin indecisiones ni miedo, sino con firmeza. Para la comunidad musulmana también se la considera una guía por revestir su fe con características de la cultura…
Leer completo comprando la en Revista Cristo Vive ¡Aleluia! Nº253 – MAYO 2024