“El que me ama, será fiel a mi Palabra, y mi Padre lo amará, iremos a él y habitaremos en él” fue el lema de la primera Pascua que realizamos en Chaco, en el año 1999.

Después de muchos años de oración se conformó en el 2018 un grupo de jóvenes universitarios que al consolidarse y permanecer, comenzaron a caminar el proceso básico de evangelización. Hicimos todo un camino para crecer y asumir la organización de las Jornadas de Pascua, que antes preparaban las nazarenas misioneras y otros hermanos venidos desde Paraguay. 

Pertenecíamos a la Región pastoral que el Padre Ricardo llamó12 Apóstoles junto con los hermanos de Paraguay. Recibimos la llegada de la misionera nazarena Karina Rullo en el 2014, quien trajo innovación e incorporación de las tecnologías al servicio de lo pastoral, alentándonos y enseñándonos a los coordinadores a ser creativos. Con su impulso, nos sentimos en salida al servicio y a los hermanos. Se hizo cercana, no solo al equipo pastoral de la Zona, como era hasta ese momento con otras misioneras, sino que conoció a cada uno de nosotros de modo particular. Compartió la vida, se reunió con cada equipo coordinador y se formó el Cuerpo pastoral de Chacho. Desde el año pasado, nos referenciamos al centro pastoral de Córdoba, en Argentina.

A través de Karina se dió la posibilidad que el Padre Adrián Caruso, de Nazaret Masculino, viniera por cinco años seguidos, y con él otros misioneros de la Diaconía familiar, a acompañarnos y hacer un camino nuevo con los matrimonios. Ellos participaron de talleres de formación humana donde se trabajó la madurez de la persona con el acompañamiento de la nazarena María Inés Bari.

Así, en este último tiempo, se realizaron algunas misiones como “Encuentros en la Palabra” en el mes de la Biblia, visitando distintas parroquias. Viajamos a una localidad del interior de Chaco, en la búsqueda de llevar el carisma a otros lugares. Fue de alegría en el servicio y de sorprendernos en el obrar del Espíritu Santo en cada corazón.

Las comunidades se reunieron por varios años en un Colegio, y en estas últimos, en la capilla San Francisco de Asís, de Resistencia. En la pandemia pudimos mantener virtualmente los encuentros, aun en medio de las dificultades de conexión. Fue de gracia y fortaleza en tal momento vivido como país. Se desarrolló la madurez humana y espiritual de acuerdo al proceso que se camina.

El Cuerpo pastoral de este lugar se reúne mensualmente. Se incorporaron jóvenes al servicio y actualmente varios de ellos se forman, de modo virtual, en escuelas de formación de la Obra. También se aprovecha la posibilidad de participar en las formaciones que se presentan como por ejemplo, en la escuela de música.

También participamos como Movimiento en la llamada “zona 5”, donde una vez al mes hay una reunión de un referente de cada Movimiento con el arzobispo Monseñor Duss, de la diócesis de Resistencia para compartir, formarse e intercambiar las riquezas de cada carisma en la Iglesia.

Los hermanos están muy comprometidos con la realidad local. Realizamos como comunidad del Chaco distintas ayudas, con la participación de todos, a fin de recaudar fondos para distintas necesidades: ya sea para colaborar en la capilla con refacciones, para asistir al retiro de nivel o las Convivencias de verano…

Estamos muy agradecidos al Señor por tanto que nos da y su modo de acompañarnos.

Mónica Quintana
Coordinadora pastoral de Chaco
Julio 2023